Copa del Rey

El RCD Español se acaba de proclamar campeón de la Copa del Rey, y por mucho que me pese, mis mas sinceras felicitaciones. La próxima temporada, en los estadios de segunda podrán ver a todo un campeon de Copa.

A los Sres de Tele5 les diría que aprendan a retransmitir un partido de futbol. Decir uy, uy, uy, cuando un equipo ataca no es retransmitir un partido de futbol. También recordarles a los Sres de Tele5 que la retransmisión cubría toda España, y por lo tanto dejen los favoritismos y comentarios partidistas para otro momento. A falta de los semigalacticos, bien vale un filial.
Y por último, les diria a los Sres. de Tele5 que no ignoren lo que estamos viendo muchos miles de espectadores. Aunque no han repetido la jugada, han ignorado la clara agresión de "Lo Pelat" a los pocos minutos de juego. Han ignorado también el claro fuera de juego en el que se encuentra Tamudo al arrancar en la jugada del segundo gol perico. Y han ignorado también las dos jugadas en las que sendos jugadores del Español han tocado claramente el balón con las manos en el interior del area.

Lo siento. Siento profundamente que haya vuelto a triunfar el equipo que menos futbol ha hecho. Y siento también que hayan vuelto a triunfar las trampas por encima del respeto al contrario y a los espectadores. Porque yo le llamo trampas, no astucia ni picardia (Sres. de Tele5) cuando un jugador simula un fuerte golpe para provocar que saquen una tarjeta al contrario (lease Tamudo), o cuando un jugador simula una lesión para perder tiempo. Ese jugador, que a los dos minutos de quedar tumbado en el suelo, supuestamente porque se le habían subido los gemelos (tambien conocidos como bolas), es capaz de marcarse una carrera de medio campo y marcar la sentencia, curiosamente con la pierna dolorida.
De nuevo felicidades a los españolistas (entiendase "aficionados al RCD Español") que llevaban muchos meses en un profundo letargo, agazapados, calladitos y sin decir nada, porque mañana volverán a sacar pecho para volver a revindicar que son mucho mas catalanes que nosotros los del Barça. Hoy, tras ver los signos de identidad que portaban sus seguidores, no me queda ninguna duda sobre esto último.